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miércoles, 25 de septiembre de 2019

Misa ritual en la Ordenación de varios presbíteros.


Misal Romano (tercera edición). Misas Rituales

IV. EN LA CELEBRACIÓN DE LAS SAGRADAS ÓRDENES

2. En la ordenación de los presbíteros

Esta misa ritual puede utilizares, con color blanco o festivo, excepto en las solemnidades, en los domingos de Adviento, Cuaresma y Pascua, en los días dentro de la octava de Pascua y en las fiestas de los apóstoles. En estos días se celebra la misa del día.

A
En la ordenación de varios presbíteros

Antífona de entrada Jer 4, 18
Os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y experiencia [T. P. Aleluya].
Dabo vobis pastóres iuxta cor meum, et pascent vos sciéntia et doctrína (T. P. allelúia).

Se dice Gloria.

Oración colecta
Señor Dios nuestro, que para regir a tu pueblo has querido servirte del ministerio de los sacerdotes, concede a estos diáconos de tu Iglesia que han sido elegidos para el ministerio presbiteral perseverar al servicio de tu voluntad para que, en su ministerio y en su vida, puedan buscar tu gloria en Cristo. Él, que vive y reina contigo.
Dómine Deus noster, qui in regéndo pópulo tuo ministério úteris sacerdótum, tríbue his diáconis Ecclésiae tuae, quos hódie ad presbyterátus munus elígere dignáris, perseverántem in tua voluntáte famulátum, ut ministério atque vita tuam váleant in Christo glóriam procuráre. Qui tecum.

Se dice Credo, si lo exigen las rúbricas; se omite la oración universal.

Oración sobre las ofrendas
Oh, Dios, tú has querido que tus sacerdotes sean ministros del santo altar y del pueblo, concede en tu bondad, por la eficacia de este sacrificio, que el ministerio de tus siervos te sea siempre grato y dé, en tu Iglesia, frutos que siempre permanezcan. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Deus, qui sacerdótes tuos sacris altáribus tuóque pópulo ministráre voluísti, per huius sacrifícii virtútem concéde propítius, ut famulórum tuórum servítium tibi iúgiter pláceat, et fructum qui semper máneat in Ecclésia tua váleat afférre. Per Christum.

Se puede decir el prefacio I de las ordenaciones.
EL SACERDOCIO DE CRISTO Y EL MINISTERIO DE LOS SACERDOTES
Este prefacio se dice en la misa crismal y en la misa de la fiesta de Jesucristo, sumo y eterno Sacerdote.
Se puede decir también en la misa de la ordenación de obispos y presbíteros.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.
Que constituiste a tu Unigénito pontífice de la alianza nueva y eterna por la unción del Espíritu Santo, y determinaste, en tu designio salvífico, perpetuar en la Iglesia su único sacerdocio.
Él no solo confiere el honor del sacerdocio real a todo su pueblo santo, sino también, con amor de hermano, elige a hombres de este pueblo, para que, por la imposición de las manos, participen de su sagrada misión.
Ellos renuevan en nombre de Cristo el sacrificio de la redención, preparan a tus hijos el banquete pascual, preceden a tu pueblo santo en el amor, lo alimentan con tu palabra y lo fortalecen con los sacramentos.
Tus sacerdotes, Señor, al entregar su vida por ti y por la salvación de los hermanos, van configurándose a Cristo, y han de darte testimonio constante de fidelidad y amor.
Por eso, Señor, nosotros, llenos de alegría, te aclamamos con los ángeles y con todos los santos, diciendo:
Vere dignum et iustum est, aequum et salutáre, nos tibi semper et ubíque grátias ágere: Dómine, sancte Pater, omnípotens aetérne Deus: Qui Unigénitum tuum Sancti Spíritus unctióne novi et aetérni testaménti constituísti Pontíficem, et ineffábili dignátus es dispositióne sancíre, ut únicum eius sacerdótium in Ecclésia servarétur.
Ipse enim non solum regáli sacerdótio pópulum acquisitiónis exórnat, sed étiam fratérna hómines éligit bonitáte, ut sacri sui ministérii fiant mánuum impositióne partícipes. Qui sacrifícium rénovent, eius nómine, redemptiónis humánae, tuis apparántes fíliis paschále convívium, et plebem tuam sanctam caritáte praevéniant, verbo nútriant, refíciant sacraméntis. Qui, vitam pro te fratrúmque salúte tradéntes, ad ipsíus Christi nitántur imáginem conformári, et constánter tibi fidem amorémque testéntur.
Unde et nos, Dómine, cum Angelis et Sanctis univérsis tibi confitémur, in exsultatióne dicéntes:
R. Santo, santo Santo…

En las plegarias eucarísticas se hace mención de los presbíteros recién ordenados.

I. Cuando se utiliza el Canon romano se dice Acepta, Señor, en tu bondad propio.
Acepta, Señor, en tu bondad, esta ofrenda de tus siervos y de toda tu familia santa; te la ofrecemos también por estos siervos tuyos a quien te has dignado promover al orden presbiteral; conserva en ellos tus dones para que fructifique lo que han recibido de tu bondad. [Por Cristo, nuestro Señor. Amén.]
Hanc ígitur oblatiónem servitútis nostrae, sed et cunctae famíliae tuae, quam tibi offérimus étiam pro his fámulis tuis, quos ad presbyterátus Ordinem promovére dignátus es, quaesumus, Dómine, ut placátus accípias, et propítius in eis tua dona custódias, ut, quod divíno múnere consecúti sunt, divínis efféctibus exsequántur. (Per Christum Dóminum nostrum. Amen.)

II. Cuando se utiliza la Plegaria eucarística II la mención se intercala en la intercesión Acuérdate, Señor.
Acuérdate, Señor, de tu Iglesia extendida por toda la tierra; y con el papa N., con nuestro obispo N., llévala a su perfección por la caridad. Acuérdate también de estos siervos tuyos que has constituido hoy presbíteros de la Iglesia, y de todos los pastores que cuidan de tu pueblo.
Acuérdate también de nuestros hermanos que durmieron en la esperanza de la resurrección...
Recordáre, Dómine, Ecclésiae tuae toto orbe diffúsae, ut eam in caritáte perfícias una cum Papa nostro N. et Epíscopo nostro N. Recordáre quoque istórum famulórum tuórum, quos hódie presbyteros Ecclésiae providére voluísti, et univérsi cleri.
Meménto étiam fratrum nostrórum...

III. Cuando se utiliza la Plegaria eucarística III la mención se intercala en la intercesión Te pedimos, Padre, que esta Víctima.
Te pedimos, Padre, que esta Víctima de reconciliación traiga la paz y la salvación al mundo entero. Confirma en la fe y en la caridad a tu Iglesia, peregrina en la tierra: a tu servidor, el papa N., a nuestro obispo N., al orden episcopal, a estos siervos tuyos que han sido ordenados hoy presbíteros de la Iglesia, a los demás presbíteros, a los diáconos, y a todo el pueblo redimido por ti.
Atiende los deseos y súplicas...
Ecclésiam tuam, peregrinántem in terra, in fide et caritáte firmáre dignéris cum fámulo tuo Papa nostro N. et Epíscopo nostro N., cum episcopáli Ordine et his fámulis tuis, qui hódie presbyteri Ecclésiae ordináti sunt, et univérso clero, et omni pópulo acquisitiónis tuae.
Votis huius famíliae...

IV. Cuando no se utiliza el prefacio propio se puede emplear la Plegaria eucarística IV. La mención se intercala en la intercesión Y ahora, Señor, acuérdate.
Y ahora, Señor, acuérdate de todos aquellos por quienes te ofrecemos este sacrificio: de tu servidor el papa N., de nuestro obispo N., del orden episcopal, de estos siervos tuyos que te has dignado elegir hoy para el ministerio presbiteral en favor de tu pueblo, de los demás presbíteros y diáconos; acuérdate también de los oferentes y de los aquí reunidos, de todo tu pueblo santo y de aquellos que te buscan con sincero corazón.
Acuérdate también de los que murieron...
Nunc ergo, Dómine, ómnium recordáre, pro quibus tibi hanc oblatiónem offérimus: in primis fámuli tui, Papae nostri N., Epíscopi nostri N., et Episcopórum Ordinis univérsi, et istórum famulórum tuórum, quos hódie ad pópuli tui servítium presbyterále elígere dignátus es, sed et totíus cleri; recordáre quoque offeréntium, et circumstántium, et cuncti pópuli tui, et ómnium, qui te quaerunt corde sincéro. 
Meménto étiam illórum...

Antífona de la comunión Cf. Mc 16, 15; Mt 28, 20
Id al mundo entero y proclamad el Evangelio; yo estoy con vosotros todos los días, dice el Señor [T. P. Aleluya].
Eúntes in mundum univérsum, praedicáte Evangélium: ego vobíscum sum ómnibus diébus, dicit Dóminus (T. P. Allelúia).

Oración después de la comunión
Te pedimos, Señor, que el sacrificio santo que te hemos ofrecido y recibido en comunión llene de vida a tus sacerdotes y a todos tus siervos, para que, unidos a ti por un amor constante, puedan servir dignamente a tu majestad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Sacerdótes tuos, Dómine, et omnes fámulos tuos vivíficet divína, quam obtúlimus et súmpsimus, hóstia, ut, perpétua tibi caritáte coniúncti, digne famulári tuae mereántur maiestáti. Per Christum.

Bendición solemne al final de la misa
El obispo, con las manos extendidas sobre los presbíteros recién ordenados y el pueblo, dice:
Dios, que dirige y gobierna la Iglesia, os proteja siempre con su gracia para que cumpláis fielmente el ministerio presbiteral.
Deus, Ecclésiae institútor et rector, sua vos constánter tueátur grátia, ut presbytérii múnera fidéli ánimo persolvátis.
R. Amén.
Que él os haga servidores y testigos en el mundo, de la verdad y del amor divino, y ministros fieles de la reconciliación.
Ipse divínae vos fáciat caritátis et veritátis in mundo servos et testes, atque reconciliatiónis minístros fidéles.
R. Amén.
Y que os haga pastores verdaderos que distribuyan a los fieles la palabra de la vida y el pan vivo, para que crezcan en la unidad del cuerpo de Cristo.
Et vos fáciat veros pastóres, qui fidélibus tríbuant panem vivum et verbum vitae, ut magis crescant in unitáte córporis Christi.
R. Amén.
Y bendice a todo el pueblo añadiendo:
Y a todos vosotros, que estáis aquí presentes, os bendiga Dios todopoderoso, Padre , Hijo , y Espíritu Santo.
Et vos omnes, qui hic simul adéstis, benedícat omnípotens Deus, Pater, + et Fílius, + et Spíritus + Sanctus.
R. Amén.

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